Giles tiene un toque de oro: inversiones, caballos, conexiones, pero cuando se enamora de Suzanna, ella lo rechaza a pesar de la pasión que se enciende entre ellos. Al final del ingenio, Giles le apuesta a que no solo se casará con él, sino que hará que se enamore de él. Si Suzanna gana, gana una fortuna considerable para su organización benéfica favorita, pero se enfrenta a un matrimonio sin amor con un hombre con título. Aunque su corazón anhela un verdadero matrimonio por amor con Giles, nunca ha ido en contra de los deseos de sus padres. Todas las apuestas se cancelan cuando la felicidad radica en perder una apuesta.
Mil gracias a BL!
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